“Nosotros desde INTA tenemos experiencias de años anteriores usando caravanas electrónicas, y aportan mucha información sobre la sanidad de los animales…Creo que este cambio nos va a permitir disponer de mayor cantidad de datos, que luego va a servir para la toma de decisiones cuando cada animal individualmente esté identificado”, señala Margineda.

Aunque muchos hayan cuestionado la velocidad de la implementación de este sistema, el especialista plantea que es necesario avanzar en este sentido, ya que “no es muy sofisticado lo que se trata de implementar, ni tan costoso. Los botones creo que tienen un costo de cerca de U$S1 por animal, y los bastones cerca de U$S1.000”, precisa el también docente de la FCV de la Universidad Nacional de Rosario.

En cuanto a los beneficios concretos de estas herramientas, Margineda  explica que más allá de todos los datos que puede aportar para mejorar el rodeo, “desde el punto de vista de la sanidad posibilita hacer un registro de enfermedades, de sus brotes, detectar eventos sanitarios, ya sea tempranamente por corral, por parcela o por potrero. Llevar también un registro de tratamiento, importante para el periodo de retirada del producto, porque si va a faena y se pueden rastrear estos residuos en la carne, es importante saber las fechas de cuando se aplicó”, subraya.

Fuente: Noticias Agropecuarias